En tus manos, puedo realmente ser completamente libre.
En tus manos, puedo volar hasta el firmamento.
En tus manos, es donde realmente estoy protegida.
En tus manos, crece la esperanza para mi vida.
En tus manos, fui hecha nueva criatura.
En tus manos, todos mis pecados fueron perdonados.
En tus manos, camino confiada y segura.
En tus manos, encuentro el pan de cada día.
En tus manos, mi alma encuentra paz y reposo.
En tus manos la risa es libre y espontánea.
En tus manos, me siento verdaderamente amada.
En tus manos, Padre Amado, soy realmente tu hija.